Envío

Mi maestra amada:

Al contemplar tu faz,

Mi alma entusiasmada

Vibra en tu eterna paz.

Paz, porque es del cielo

Tu hermosa profesión;

Paz, porque es consuelo

Y eterna abnegación.

Mensajera de amor:

Te llamo de hinojos

Porque el mundo es dolor.

Ven, y que los abrojos

Que haya en mi derredor,

Sean miel en tus ojos.

Libro: Rayito de Luz

Autor: Epifanio Estrada Cruz